Martes - 18

Fuímos a la Isla Negra por todo el dia. Nos encontramos en frente del Ichil para juntarnos y seguir a la Isla Negra. La casa de Neruda, llamada Isla Negra, no está en una isla, tampoco la arena es negra. Y, dicho por Don Camilo, el oceano pacífico, no es tan pacífico. Pero la poesia no necesita de razón.

Tomamos el Camino del Sol que va hasta la playa e hicimos una parada en puerto San Antonio. Es el mayor del Chile en exportacion e importacion. Desde allá salen los barcos con produtos chilenos. Allá vimos los leones marinos y los pelicanos. No me gustó mucho ver los leones marinos acostados en medio de la basura. El puerto es sucio como todo puerto es y tiene una feria de pescados que ofrece locos, mariscos, crangrejo y otros frutos del mar.

Después de oir muchas historias interesantísimas acerca del exilio de los directores del Ichil en Alemania, sobre la ditadura en Chile y la creación del Instituto de la lengua Española en Chile, llegamos a Isla Negra. El grupo se dividió en dos para hacer la visita guiada. La casa de Neruda en Isla Negra tiene dos formas predominantes: de un barco (con puertitas muy pequeñas) y de un trem, con sus vagones. Muchas coleciones hacen parte de la casa: de botellas, de máscaras, de guantas (bolsas del agua), de conchitas. La casa tiene aún un baño solamente para hombres con muchas fotos de mujeres... Hay diablos en la puerta para mantener las mujeres llejos de allá... Pobrecito de Neruda! No sabia que las mujeres son las mejores amigas del diablo. En el fondo, el diablo tiene mucho miedo de nosotras...

Después de la visita a la casa de Neruda en Isla Negra pudimos ir al mar. Isa puso, por primera vez, sus piez en el Pacífico. Yo gravé el acontecimiento memorable.

Subimos al rostro de piedra de Neruda que está arriba de una piedra en frente a la casa. Thiago se quedó jugando con unas algas cerca del mar. Esas algas son muy buenas para la comida. Y, pienso, que sirven como cuerdas también porque son muy fuertes.

Cuando volvimos, hicimos una parada en Pomaire. Un pueblo que tiene muchos restaurantes y artesanos. Comimos pastel de choclo y empanadas en un lugar llamado Los Naranjos. Estaba sonando cueca todo el tiempo. Me quedé con ganas de aprender a bailar la cueca. Tomé un pisco sour y compré unas cositas para mi sobrina Pietra. Estoy extrañandola.

Por la noche fuí con Greg a ver la muestra en Rio Mapocho, cerca de mi casa. Fué muy lindo porque los artistas puseron luces con dibujos artisticos en el rio. La muestra va a quedarse en el rio hasta el final del año. Muy lindo.

Comentários